Un hogar smart, según LG, es fundamental para que el cuidado del medio ambiente empiece desde el hogar.
Tras un día agotador en la oficina, estancados en el tráfico o caminando agitados por las calles, lo único que deseamos es llegar a nuestros hogares a relajarnos y, por fin, descansar.
Para muchos, llegar a casa es como volver a un refugio cómodo, familiar y seguro. Hoy en día, la tecnología ofrece beneficios que están transformando ese refugio en algo más sofisticado, complejo y que, además, busca cuidar el medio ambiente.
¿Qué es lo que convierte una casa en un verdadero hogar? Según la psicóloga ambiental Susan Clayton, pese a las diferencias culturales y los factores económicos, las personas alrededor del mundo buscan lo mismo en sus hogares: “si bien el concepto del hogar ideal puede variar de persona a persona, todos compartimos el deseo de contar con un espacio donde realmente podamos expresarnos”.
Así, el hogar se constituye como un componente crucial en cómo las personas se definen a sí mismas y a su entorno.
Las nuevas tecnologías (cada vez más intuitivas, personalizadas y con grandes mejoras en su usabilidad) hacen que hoy más que nunca los dueños de casa puedan completar ese deseo de un espacio privado que refleje sus pasiones y su personalidad.
Con sistemas electrónicos inteligentes, heladeras y otros electrodomésticos que pueden controlarse con la voz y robots intuitivos que se adelantan a nuestras necesidades, los hogares inteligentes están dejando de ser una utopía para convertirse en una realidad.
Por su parte, el desarrollo de tecnologías IoT ofrece cada vez más soluciones personalizadas y enfocadas en el usuario para el control de la energía, permitiendo que estos controlen cada aspecto de su hogar para conservar energía con mayor eficiencia.
De acuerdo con Youris.com, una agencia de investigación europea, el mercado IoT está creciendo a pasos agigantados: se proyecta que para 2018 habrá en los hogares 3,3 miles de millones de dispositivos conectados y en uso.
De esta manera, la casa del futuro ya no se plantea como un conjunto de gadgets independientes, sino de un sistema capaz de nuclear cada pieza tecnológica para incrementar la eficiencia general del hogar. Así, un hogar inteligente se convierte en eco-friendly porque se orienta al ahorro de energía.
Por ejemplo, las heladeras Door in Door, evitan el ingreso de masas de aire caliente que desestabilizan la temperatura del interior y obligan al motor a trabajar más.
Este cuidado también es aplicado en electrodomésticos de lavado: los lavarropas Inverter Direct Drive por ejemplo, ahorran no sólo un 15% de energía eléctrica sino también un 40% de agua, un recurso natural cada vez más escaso.
En Argentina, el consumo eléctrico está íntimamente relacionado con la temperatura: en las estaciones de frío o calor intenso, el consumo eléctrico aumenta dramáticamente.
Así, equipos de aire acondicionado como los Mega y Artcool Arcool Inverter de LG, que permiten al usuario seleccionar el nivel de consumo de energía que deseen, se convierten en la opción ideal para quienes valoran eficiencia y ahorro, frente a la opción de otros aires con un motor convencional ON/OFF.
Varias de estas tecnologías han sido reconocidas en el ranking Top Ten de consumo energético presentado por la Fundación Vida Silvestre en marzo, que informa acerca de los electrodomésticos energéticamente más eficientes del mercado argentino.
Como vemos, la nueva ola de artefactos domésticos de avanzada busca adecuarse a las necesidades actuales del consumidor: en este caso, la del ahorro de tiempo y energía. “Estos productos ofrecen soluciones enfocadas en el usuario, haciendo énfasis en la personalización y el control”, afirmó Juan Pedro Andrade, Head of Marketing de LG Electronics Argentina.
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