El mundo digital ha cobrado protagonismo debido a la necesidad de tomar distancia social, cambiando así la forma de hacer negocios, en la actualidad es importante para las empresas tener una plataforma de venta digital para tener un modelo rentable. Sin embargo, para octubre del 2020, el 70% de las empresas en Chile aún no se habían digitalizado, según el estudio realizado por Zetech.

Entrar al mundo del Ecommerce, no sólo se trata de que las empresas tengan una plataforma para vender online, sino que cuenten con aquella que más se adapte a su modelo de negocio y necesidades. Existen tres caminos a tomar en cuenta a la hora de elegir la solución virtual adecuada:

1. El primero es tener un desarrollo propio, modelo ya obsoleto, solo recomendado en casos muy particulares, ya que requiere tiempos de implementación más largos, además de que existen otras desventajas, por ejemplo: mayores costos (al no generar economía de escala, ya que cada cambio o nueva funcionalidad debe ser costeada por una sola empresa), pérdida de foco comercial (estas iniciativas suelen derivar en proyectos de desarrollo software), riesgos asociados a seguridad e infraestructura, entre otros. Esta alternativa sería el equivalente a una empresa que desarrolle en forma interna su ERP, POS o sistema logístico propio.
2. La segunda alternativa es utilizar una plataforma opensource o de código abierto. Si bien puede significar mejores tiempos de implementación que la alternativa anterior, igualmente se requiere implementar y configurar todo lo relacionado con infraestructura, seguridad y nuevas funcionalidades, los cuales van convirtiendo al proyecto en mediano o largo plazo, en un desarrollo de software a medida. Es un mito pensar que esta alternativa es “gratis”, ya que si bien el código inicial se puede obtener sin costo, las configuraciones, infraestructura y desarrollos tienen costos asociados.
3. El tercer camino es una plataforma de código único, más conocido como SaaS (Software as a Service) o PaaS (Platform as a Service), estas alternativas consideran tecnología “Cloud”. Normalmente este tipo de plataformas tienen costos asociados mensuales, proporcionales al uso u operación. Aquí queda considerada la escalabilidad (que tiene relación con el flujo o tamaño de venta), el almacenamiento (ligado a los datos), infraestructura (que tendrá soporte tecnológico), seguridad y la constante evolución de la plataforma, ya que las mejoras quedan disponibles para todos los clientes.

Esta solución, en definitiva, permite minimizar cualquier otro tipo de riesgo, además de permitir un foco mucho más comercial, ya que se deja en manos de expertos todo lo relacionado con las mejoras al software, infraestructura y seguridad.

Conociendo los escenarios, es importante hacer la mejor elección para potenciar un canal de venta digital de manera segura, eficiente y responsable. Es por esto que Magdalena del Solar, gerente de Desarrollo de Negocios de Ecomsur, hace hincapié en los elementos en que hay que poner atención para determinar qué plataforma usar:

1. Seguridad: independiente si es mejor o peor una alternativa a la otra, alguien tiene que encargarse de velar por el correcto funcionamiento del canal digital para evitar posibles filtraciones, hackeos o vulneraciones.
2. Desarrollo o actualizaciones: si no lo está haciendo la plataforma, esta tarea correrá a cargo de la empresa, el mundo digital va cambiando constantemente y siempre hay que contar con nuevas funcionalidades que rápidamente los clientes comienzan a considerar como “estándares”.
3. Infraestructura: es necesario el monitoreo del buen funcionamiento para evitar que el sitio esté no disponible o inestable en momentos de alta demanda por parte de los consumidores. La escalabilidad es clave.
4. Integraciones con medios de pago: deben considerarse distintos medios de pago que se adecuen a cada realidad de los consumidores, desde pagos online hasta offline. Es importante que las plataformas tengan estas funcionalidades o se deben desarrollar.
5. Soporte local: cuando sabemos que el cliente es el centro del negocio, es fundamental saber que vamos a contar con un proveedor que responda ante cualquier inconveniente o duda, en un canal cada vez más importante, principal “vitrina” de la marca y que además es 24×7.

Es esencial entender bien los modelos comerciales de cada alternativa que hay en el mercado, porque según el tipo de plataforma se tendrá un modelo de valor diferente; se debe considerar que la necesidad de inversión crecerá con el flujo de operación que se requiera, esto debido a que el manejo del comercio electrónico requiere pagos por un código, por el % de venta, por el uso de servidores, por el uso o mantención de una infraestructura tecnológica, por las horas desarrollo, etcétera.

Hay que tener claro desde el comienzo que los costos de cualquier plataforma irán asociados al volumen del nivel de venta de la compañía.

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