“Las 100 mejores empresas para trabajar” logran un valor creciente de la confianza de sus colaboradores a medida que la inteligencia artificial (IA) avanza, según analizó Michael C. Bush, CEO Global de Great Place To Work (GPTW), autoridad mundial en cultura laboral.

Según Bush, el futuro del trabajo está impulsado por la IA generativa. “Las empresas impulsadas por un propósito asegurarán que la IA se utilice para resolver los complejos problemas que surgen al garantizar que todas las partes interesadas prosperen en este nuevo capitalismo con arquitectura de máquinas”.

Los prejuicios humanos crearán “restricciones sesgadas y discriminatorias”. Las soluciones serán óptimas para unas pocas partes interesadas (ciertamente accionistas), pero no serán óptimas para todos los demás, como los colaboradores, las comunidades y el medio ambiente. Al igual que hoy, donde cada espacio de empleo del mundo es un excelente lugar para trabajar para algunos, pero crea más inequidad y desigualdad de ingresos para otros.

Cuando un lugar de trabajo es un excelente lugar para trabajar para todos, y todas las partes intervinientes se beneficiarán de la abundancia de la IA.

Los empleados se complementarán con la IA mientras esta crea y elimina puestos laborales. Durante cualquier tiempo de inactividad, los colaboradores recibirán capacitación en inteligencia artificial y/o estarán ocupados resolviendo problemas educativos o ambientales complejos en sus comunidades. Así funcionarán las grandes empresas.

La confianza, el eje

Si bien esta revolución de la IA es importante para los líderes, la importancia no equivale a la confianza. La mayoría de ellos admiten que no se sienten preparados para liderar a su gente a través de la revolución de la IA.

La revolución no es una hipérbole. La IA transformará radicalmente la forma de trabajar y el cambio acarrea miedo. A las personas les preocupa perder sus empleos y si su empresa utilizará, o no, la nueva tecnología de manera responsable y ética.

La responsabilidad de aplacar estos temores recae sobre los líderes. Todo líder deberá transformarse para convertirse en el “ejecutivo ” de nivel cinco de Jim Collins y que en Great Place To Work se denomina el “líder para todos”.

Los empleados deben tener confianza en sus managers antes de poder confiar en el uso de la IA, aprovechar su potencial y apoyarse y dar más para resolver problemas complejos.

Es por eso, que Bush confía en el nivel de preparación para la IA de la lista Fortune 100 de “Los Mejores Lugares para Trabajar 2024”.

Los líderes de estas empresas ayudarán a sus colaboradores a prosperar, porque están centrados en lo único que impulsará el éxito: la confianza.

El antecedente de la pandemia

Las empresas que figuran entre los “100 Mejores Lugares para Trabajar” han demostrado sus capacidades en el campo de batalla. Demostraron su capacidad para generar confianza con los colaboradores durante los años de pandemia de 2020 a 2023, cuando el miedo y la incertidumbre eran la única constante. Esa reserva de confianza les ayudará a superar a sus competidores y les dará una ventaja competitiva en el espacio de la IA.

Sus altas puntuaciones en el Great Place To Work Trust Index fueron notablemente estables antes, durante y después de la pandemia, en todas las áreas de la experiencia de los colaboradores, particularmente en torno al liderazgo.

Los “100 Mejores Lugares para Trabajar” superaron a los lugares de trabajo del resto del mercado en al menos un 45%, y hasta un 73 % en lo que respecta a la confianza en la dirección.

¿Qué tiene esto que ver con la IA? Todo. La confianza es la moneda del trabajo hoy. Si pudiera crear un telón de fondo para el mundo actual, deletrearía la palabra confianza lo más grande que pudiera.

La confianza les dice a los colaboradores que su empleador utilizará la IA de una manera que hará que su experiencia en el lugar de trabajo sea mejor y más equitativa. Los consumidores buscarán dónde trabaja la gente para decidir si pueden confiar en sus marcas favoritas. Puede confiar en cómo una empresa utiliza la IA si sabe que sus empleados confían en ella.

La confianza en los líderes parece tener una gran demanda, pero poca oferta. Casi el 90% de los 14.000 líderes de un informe de Deloitte dijeron que un mayor enfoque en la confianza y la transparencia con los colaboradores es importante para el éxito empresarial, pero sólo el 13% dijo que están logrando avances significativos.

Agilidad e innovación

En ese marco, la agilidad y la innovación impulsan el éxito de la IA. Es más probable que las culturas de alta confianza sobresalgan en las áreas esenciales para el éxito de la IA: agilidad, innovación y esfuerzo extra.

Del ranking de los “100 Mejores Lugares para Trabajar”, se desprende que el 86% de los empleados siente que las personas están dispuestas a hacer un esfuerzo adicional y el 83% siente que los colaboradores se adaptan rápidamente a los cambios, en comparación con el 59% y el 61% que refleja el mercado respectivamente. A su vez, el 84% de los empleados dijeron que experimentan “muchas” o “algunas” oportunidades de innovación.

Cuando más colaboradores pueden contribuir a la innovación, es más probable que digan que su trabajo es significativo y quieran permanecer en su empresa a largo plazo.

Estos altos niveles de adaptabilidad, esfuerzo extra e innovación no son posibles sin una base de confianza construida a lo largo del tiempo mediante la colaboración con los empleados buscando sus opiniones, involucrándolos en las decisiones y brindándoles información sobre cambios importantes.

Mejor para el negocio

Vemos el resultado de esa confianza en los rendimientos acumulados durante 26 años en los 100 Mejores Lugares para Trabajar, que superaron al Russell 1000 por unos asombrosos 1.896 puntos porcentuales, gracias a contar con un lugar de trabajo comprometido y ágil.

Eso significa que, si hubiera invertido en las 100 mejores empresas que cotizan en bolsa desde 1998, habría ganado 3,68 veces más dinero que con la misma inversión en la cartera Russell 1000, donde se encuentran las principales empresas por capitalización de mercado en EE. UU.

La IA podría ser el mayor disruptor en el lugar de trabajo hoy, pero no es el único. Los líderes tienen que gestionar los desafíos políticos, sociales y ambientales actuales y, al mismo tiempo, alcanzar sus cifras comerciales.

Para lograrlo, necesitan de las mejores personas que sepan utilizar la tecnología de la manera correcta, y, en este caso, la IA los ayudará a dar con esos colaboradores más rápido y mejor que nunca antes.

La IA puede comprender e interpretar el trabajo que las personas están haciendo actualmente, el que están interesadas en hacer y, lo más importante, el que son capaces de aprender de forma dinámica y en tiempo real.