Son cientos de talentos chilenos que en los últimos años han cambiado los cargos que ocupaban en bancos, empresas TI o startups locales para emigrar a grandes empresas como Spotify, Slack, Google, Facebook, AirBnB, SoundCloud, Amazon y Microsoft.

Pertenezco a una empresa que está conformada íntegramente por colaboradores tech en la que hemos tenido éxito al mantener una baja rotación -menor al 10% anual- y, aunque somos extremadamente conscientes de la competencia global por el talento, hemos encontrado la forma de mantener un equipo estable, con una antigüedad promedio de más de 4 años.

Estos son algunos tips desde nuestra experiencia:

1. Entregar tanta autonomía como sea posible: “No tiene sentido contratar gente inteligente para decirles qué tienen que hacer. Contratamos gente inteligente para que nos diga a nosotros qué hacer”, dijo Steve Jobs. Ojo, esto no se limita a cosas superficiales como vestimenta y horarios. Si tus talentos quieren cambiar tus herramientas o tus procesos, es para optimizarlos. Déjalos experimentar en un entorno donde el radio de error esté controlado.
2. Dar responsabilidad en la contratación: Está enmarcado en el punto anterior, pero es tan importante que merece un espacio aparte. A los talentos les encanta trabajar con gente ingeniosa. En temas muy técnicos, son otros expertos los que pueden evaluar si nuevos candidatos a tu equipo son realmente un aporte. Si los colaboradores no tienen influencia en la selección de sus compañeros de trabajo, tarde o temprano cometerás errores que harán que además pierdas a tus mejores profesionales.
3. Conectar con el resultado de su trabajo: Los talentos disfrutan poniendo en práctica sus habilidades, pero también querrán ver el resultado de su trabajo plasmado en algo. A todos nos gusta sentirnos orgullosos y satisfechos.
4. Abrir espacios y facilitar su desarrollo: La gente talentosa le tiene cariño a su disciplina y disfruta aprendiendo más de ella. Dales tiempo, oportunidad y recursos para desarrollarse. Invítalos a participar a eventos que los permita crecer como profesionales como talleres, cursos o conferencias como StarsConf que ofrezcan un espacio para la transferencia de conocimiento y aprendizaje de las mejores prácticas provenientes de referentes en la materia. Dale oportunidad de experimentar con tecnologías de punta, ya que si no le das espacio para seguir aprendiendo pronto encontrarán un nuevo desafío en otro lugar.
5. No forzar el “ascenso” a una posición de manager: Es un punto relacionado con el anterior, pero es un error tan común que merece tratarlo explícitamente. En muchas organizaciones la única manera en que un talento tech puede acceder a un mejor sueldo es convertirse en jefe-de-algo. Eso envía un claro mensaje de que la maestría técnica no es valorada por tu empresa e inevitablemente hace que los talentos busquen un lugar que sí los aprecie.

Ciertamente todos esos puntos son más fáciles de decir que de hacer, pero hay un último punto más crítico aún: la genuina empatía y preocupación por el bienestar de la gente que trabaja contigo. Aunque trabajemos en un mundo digital el recurso humano es fundamental para el día a día por lo que es necesario valorarlo.

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