En el marco del EY Strategic Growth Forum México 2018, socios de la firma EY aseguran que la Ciudad de México se encuentra lista para el desarrollo vertical y cuenta con la tecnología necesaria para iniciar el desarrollo de un modelo de ciudad inteligente.

La Ciudad de México tiene las condiciones para ser una Smart City, cuenta con una sociedad sofisticada y conectada, nada ajena a las tecnologías actuales, el momento histórico de cambio que se vive y el recurso intelectual, forman el ecosistema perfecto para la transformación digital de la Ciudad.

Henry González, líder de mercado para  México y Centro América del sector de bienes raíces, comentó que los gobiernos, empresa e instituciones deben prepararse para la concentración de las grandes poblaciones, creando economías e infraestructuras inteligentes, que permitan elevar la productividad, el aprovechamiento de los recursos así como elevar la calidad de vida de la ciudadanía, condiciones con las que se conseguirían ahorros hasta del 40% en el consumo de energía eléctrica y un 25% en el consumo de agua.

Si bien es cierto que a nivel mundial existen 31 mega ciudades que tiene más de 10 millones de habitantes, en México actualmente hay más de 8 ciudades con más de 1 millón de habitantes. Las necesidades son claras.

Por su parte Moisés Alcalde, socio líder para el gobierno y sector público de EY, aseguró que los gobiernos deben de tener soluciones digitales para la resolución inmediata de los problemas, la transformación digital de las ciudades es un reto de todos, lo más importante es identificar qué hay un problema que se tiene que atender de manera inmediata, segundo tener una visión a largo plazo; con un plan estratégico pues no se puede transformar una ciudad de un día para otro, y por último una coordinación entre Academia, sector público, iniciativa privada y sociedad civil.

Ciudades como Mérida, Querétaro y Puebla son ejemplo de transformación pues llevan ventaja en parte de estos procesos y en la implementación de modelos de digitalización.

A pesar de que no se cuenta con una estimación del costo que representa transformar una ciudad como la nuestra, se conoce que lo más importante es la transparencia y el cuidado de la información,  partiendo de la base que el primer paso será lograr la conectividad y con ella el tráfico de datos.

La sociedad en general está reconociendo que transformar la ciudad en una smart city es una necesidad, es tiempo justo de enfocar y planear a largo plazo, es necesario realizarla desde un esquema programado y diseñado para su implementación de manera paulatina y ordenada para una mejor administración de recursos.

El caso de México es un síntoma que define la realidad de necesidad qué hay en América latina de desarrollar smart cities para efectos de desarrollo urbano, optimización de recursos, mejor gestión, operación y atención de temas de seguridad, mejoramiento de esquemas de transporte público y temas asociados a la movilidad como el desarrollo de soluciones de Pool.

Los vehículos pasan el 95% del tiempo estacionados y cuando están en movimiento, generalmente solo se utiliza el 35 % de su capacidad, por esta razón uno de los primeros pasos hacia la transformación de la movilidad es el compartir los vehículos, paso que actualmente es una realidad con plataformas que incentivan la práctica del “Pool” sin embargo, se debe evaluar la infraestructura que existe y el ambiente ideal en dónde se desarrollará para una mejor aplicación.

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